Las Casas: el obispo de dios (La audiencia de los confines. Crónica en tres andanzas) 

Las Casas: el obispo de dios (La audiencia de los confines. Crónica en tres andanzas) 

Teatro , 1957

Cátedra

Páginas 568

Aunque reconocido y premiado, más como novelista, poeta y aun ensayista, Asturias siempre se sintió vocacionalmente un dramaturgo, creador, además, del «teatro americano de inspiración indígena», diferente y renovador del, entonces imperante, occidental y burgués. Y si la clave esencial de su obra radica en su dramaturgia, hasta hoy injustamente postergada, el protagonismo debe recaer en «La Audiencia de los Confines» (1957), revisada, antes de morir, en 1971, bajo el título de «Las Casas: el Obispo de Dios». Porque, para Asturias, que quiso ser el «alter ego» de fray Bartolomé de las Casas, y, por tanto, un «Don Quijote» americano encarnado en su sueño de justicia humana, tan indígena como mestiza, e hispánica, el «Apóstol de los Indios» habría sido el primer mestizo, un europeo de corazón indio, verdadero hijo simbólico de Hernán Cortés, el conquistador, y de Doña Marina, «Malinche» o «Malintzin», la indígena. Constituyendo la de Las Casas, en fin, una lucha en pos de la libertad del hombre, frente a la esclavitud impuesta por su congéneres.